- En aspecto ecológico los niños son muy sensibles a cuidar el medio ambiente, sin embargo al Patrimonio Cultural de la Humanidad no, porque no han tenido ese acercamiento y sensibilización en las escuelas. Éste es el problema.
Llegué a casa de la Doctora Esperanza Ramírez Romero la tarde de un viernes, después de saludarnos, como siempre me recibió con una sonrisa y una taza de café endulzada con miel. Empezamos a conversar y hablamos de muchos temas, pero uno que me pareció fundamental fue el de la importancia que tiene el transmitir de generación en generación el cuidado y preservación de Morelia como Patrimonio Cultural de la Humanidad.

“Es un honor pertenecer a ese listado del Patrimonio Cultural de la Humanidad, por eso es necesario contarlo a cada nueva generación”.
“Con la edición del libro “Mi ciudad y yo” para que se usara como libro de texto en las escuelas primarias, se logró por dos años un programa de dos semanas que nos dio la Secretaria de Educación Pública (SEP), una hora diaria, íbamos por grupos en las escuelas que están dentro del Centro Histórico, entonces les hacíamos la narración a los niños de por qué es importante la ciudad y el ser Patrimonio Cultural de la Humanidad y los valores que miró la UNESCO para otorgarle ese nombramiento: su traza, su arquitectura y su historia. Esos niños ya crecieron, ahora son hombres. Resulta que hay que estar cada año con el nuevo grupo que llega a tercer de primaria explicándoles esto porque hay una línea muy débil entre la memoria y lo que se debe recordar”.

“El libro no se colocó porque la SEP pidió tres ejemplares para que pasara por un dictamen de un Consejo en Ciudad de México, mandaron el resultado de que es un libro útil. Yo hacía énfasis para el rescate de identidad, es importantísimo despertar en los niños el orgullo de vivir en una Ciudad Patrimonio Cultural. Me dijeron que podía quedar este libro como material de ayuda para ellos dentro de los textos que tienen obligatorios. Pero exprofesamente dedicarle una hora a la semana para que tuvieran una clase no se podía- Entonces, pues se quedó así”.
“En Morelia cuando vine me dijeron que quedaría como libro de referencia puesto que los infantes tienen su libro de texto. En aspecto ecológico si lo cubren, los niños son muy sensibles a la ecología, sin embargo al Patrimonio no, porque no han tenido ese acercamiento y sensibilización. Éste es el problema”.
“Si se tratará de una escuela particular si le interesara al Director sabemos que todo es posible, pero en la SEP son muy cuadrados. En realidad el estudio del libro es conveniente para los niños de tercer año”.
“Mi ciudad y yo”, Esperanza Ramírez Romero, 1a edición, Formato: libro impreso, Omega, 1992.
- Disponibilidad: Ítems disponibles para préstamo: Biblioteca de la Escuela de Bellas-Artes [Signatura topográfica: F1306 R45 1992] (1),
- Biblioteca de la Facultad de Arquitectura [Signatura topográfica: F1306 R45 1992 ] (1),
- Hemeroteca Pública Universitaria “Mariano de Jesus Torres” [Signatura topográfica: F1306 R45 1992] (1).