“Para mí la Catedral no es barroca, es manierista” Dra. Esperanza Ramírez Romero.
La primera piedra para la construcción de esta majestuosa obra se colocó el 6 de Agosto de 1660 y se terminó de construir en 1744. a Catedral de Morelia es la màs
La altura de sus torres es de 66.8 metros. su pola bautismal es de plata y ademàs resguarda un Cristo de Marfil, cuatro jarrones chinos traídos de la Nao de Manila de la época de Nueva España, dos obras del pintor novohispano Miguel Cabrera (en una se retrata el nacimiento de Jesús y en la otra el sueño de San José, en el que el ángel le prevenía que llevara su familia a Egipto) y el báculo de Don Vasco de Quiroga, primer Obispo de Michoacán.
Pero contrario a lo que muchos han escrito sobre su estilo de caràcter barroco, la Dra. Esperanza Ramìrez explica en entrevista porque ella considera que esta monumental construcciòn sea Manierista.
Los elementos del barroco son recargados, rebuscados y no están puestos por decoración. Ellos son toda una lectura teológica que estudia la iconografía religiosa porque todo tiene su razón de ser.
El Manierismo es rebuscado, pero no recargado. El manierismo viene después del Renacimiento con el rompimiento de la serenidad clásica, hasta pudiéramos decir frialdad clásica. El nombre del Manierismo no viene de que sea amanerado más bien rebuscado, juega con los mismos elementos del barroco pero es más humano.

“He siempre luchado contra la cosa de que la Catedral es barroca porque tiene otras características. Desde luego en las fachadas ves la austeridad, más que y las proporciones las pilastras dóricas o jónicas, Las pilastras de la fachada de Las Rosas que se parecen a las de Catedral, acanaladas, fueron nombradas por Emanuel González, como barroco tableado. A mí nunca me gustó la cosa porque siento que por ahí no va la definición pues el barroco tiene otra proporción, juega con otros elementos, es más recargado, juega con lo obscuro y la luz. Los volúmenes.

El Manierista te lleva más a la grandeza. El Barroco va más a lo sensible, el Manierismo va más a la razón. Esas diferencias pueden constatarse en Catedral y por supuesto ante libros de historia de arte.